Gobernadora de Quintana Roo Destaca el Impacto del Tren Maya
Durante la conferencia de prensa mañanera en Palacio Nacional, la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, destacó el crecimiento económico de su estado gracias al Tren Maya. Sostuvo que en el primer trimestre de 2024, Quintana Roo se posicionó como la entidad de mayor crecimiento económico del país, alcanzando un 20.6 por ciento.
Crecimiento Económico en la Zona Rural de Quintana Roo
En ese sentido, Lezama destacó que la zona rural fue la que experimentó el mayor crecimiento, con un 20.5 por ciento. Frente al presidente Andrés Manuel López Obrador, la mandataria estatal detalló que se crearon 100 mil nuevos empleos registrados ante el IMSS en junio de 2024.
Inversiones y Turismo en Quintana Roo
Mara Lezama subrayó que el gobierno federal ha invertido 200 mil millones de pesos en Quintana Roo como parte de la cuarta transformación. Además, en el primer semestre del año, Quintana Roo recibió a más de 16.2 millones de personas, a través de la estación del aeropuerto de Cancún, en el aeródromo internacional.
Nuevas Infraestructuras: Centro de Investigación en Cancún
La gobernadora Mara Lezama anunció la construcción de un centro de investigación para el Instituto Nacional de Antropología e Historia en la zona de San Miguelito y la zona hotelera de Cancún.
Rescate de Piezas Arqueológicas y Cultura en Quintana Roo
“Queremos destacar la calidad de vida de los seres humanos, hemos hablado del rescate de las piezas de los sitios arqueológicos en la construcción del Tren Maya, que han ampliado la riqueza ancestral de nuestra zona», indicó Lezama. «Aprovecho para darles a conocer que el gobierno del Estado va a construir un centro de investigación para apoyar esta tarea extraordinaria a lo largo de la construcción del Tren Maya. Este centro quedará en la zona hotelera de Cancún y en la zona de San Miguelito”.
La actual temporada de incendios en Yucatán y Quintana Roo, ha superado en solo 4 meses el número de incidentes y hectáreas afectadas en todo 2023.
Pero esta cifra podría incrementarse porque los incendios continúan y estas entidades entraron a la fase más crítica de calor que es mayo y junio.
«Estamos en la etapa más crítica de la temporada de sequía y calor. El porcentaje de sequía ha aumentado definitivamente, estamos arriba del 70 por ciento, todo está increíblemente seco. Hay muchos incendios declarados no sólo en Yucatán, también en Quintana Roo», dijo Juan Vázquez, director de Fenómenos Meteorológicos extremos en Yucatán.
La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) deberá entregar el expediente completo de la solicitud de cesión de derechos de una concesión, arrendamiento o comodato, realizada en Quintana Roo.
Lo anterior, por instrucciones del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai).
Una persona presentó un recurso de revisión ante el Inai después de que hiciera su solicitud ante la Semarnat y la dependencia clasificara el expediente como reservado, bajo el argumento de que contiene opiniones, recomendaciones o puntos de vista sobre un proceso deliberativo en trámite.
El caso llegó al Pleno del Instituto bajo la ponencia de la comisionada Norma Julieta del Río Venegas, quien señaló que reflejaba el mal uso de la calificación de la información por parte de las instituciones públicas.
La comisionada exhortó a que las dependencias no tomen pretexto en los “procesos deliberativos abiertos” para reservar información.
En el análisis del caso se determinó que la clasificación del expediente es improcedente porque la información contenida no es, en sí misma, una recomendación o punto de vista de los servidores públicos que participan en un proceso deliberativo.
Así, se revocó la respuesta e instruyó a la Semarnat a proporcionar la informaciónsolicitada, relacionada con el uso o aprovechamiento sustentable de una superficie de plata, zona federal marítimo terrestre, terrenos ganados al mar o cualquier otro depósito formado con aguas marítimas.
Si bien el Gobierno Federal ha declarado nuevas Áreas Naturales Protegidas (ANP), el desarrollo inmobiliario irregular ha prevalecido en Quintana Roo ante la imposibilidad de obtener los permisos de impacto ambiental y por no contar con la facultad para hacer valer el derecho en materia de desarrollo regular por la falta de capacidades de vigilancia dentro de estas zonas.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) región Sureste, estos desarrollos ilegales se llevan a cabo en la clandestinidad debido a que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) autoriza pocas Manifestaciones de Impacto Ambiental (MIA), lo que ocasiona que se frenen obras y el desarrollo urbano del Estado, a pesar de la creciente demanda que existe.
En ese sentido, señalan que obtener un permiso de construcción inmobiliaria en la entidad puede tardar de uno a dos años dependiendo el proyecto y actualmente hay más de 100 proyectos detenidos por esta situación.
Por otra parte, a pesar de que el presidente Andres Manuel López Obrador informó a principios de octubre que México tiene más de 200 de estas áreas naturales que cubren en torno al 11 por ciento de la superficie terrestre y el 22 por ciento de la superficie marina del territorio nacional, estos esfuerzos tampoco son suficientes.
Esto se debe a la presión turística, los recortes al presupuesto de las instituciones ambientales y la falta de permisos a desarrollos inmobiliarios turísticos en Quintana Roo, que comienzan a generar consecuencias sociales y ambientales en sus populares destinos.
Mientras se decreta la protección de miles de hectáreas, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), encargada de administrar las ANP, ha sufrido de constantes recortes al presupuesto desde la administración pasada, pues los proyectos de presupuesto de egresos de la Federación presentados al Congreso de la Unión desde 2018 han quitado dinero a la dependencia año tras año.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Quintana Roo, es otra institución afectada por los recortes al presupuesto lo que se ha reflejado en una importante disminución en sus capacidades de vigilancia al contar con únicamente dos inspectores en todo el estado, situación que ha sido aprovechada por el desarrollo turístico irregular.
Destinos como la Isla de Holbox, declarada ANP desde 1994, la situación es la misma ante la presión turística, al enfrentar graves desafíos ambientales y la pérdida de su esencia natural debido a su popularidad turística y la falta de regulación efectiva, lo que ha propiciado un auge de construcción irregular descontrolada y fuera de la norma.
Un claro ejemplo de un desarrollo inmobiliario que no cumple con las normas, es Shanti Holbox, un proyecto que consta de 120 terrenos en las playas de Punta Mosquito, que son vendidos como mini lotes, pero aunque son presentados como autosustentables y sostenibles, están fuera de toda regulación y no cuentan con autorización de impacto ambiental de la Semarnat.
En Tulum la situación es la misma ya que no cuenta con un Programa de Manejo actualizado para establecer las reglas en materia de desarrollo inmobiliario al interior del polígono, lo que se ha traducido en asentamientos irregulares y falta de normas claras.
En 2015, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) cerró nueve proyectos turísticos ubicados dentro del Parque Nacional Tulum, Área Natural Protegida (ANP) desde 1981, por haber destruido ilegalmente sus ecosistemas, pero esas medidas no han sido suficientes.
De hecho, ante la creciente demanda turística, la cifra de desarrollos habitacionales inscritos en Tulum se quintuplicó en 2021, al pasar de 123 en mayo de 2020 a 625 en la actualidad, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI).
Así podrían aportar los desarrollos sostenibles en Quintana Roo
Los decretos de ANP deben estar acompañados de una estrategia, en conjunto con la Iniciativa Privada (IP), los tres niveles del gobierno, sociedad civil y las comunidades, que incentive el desarrollo sostenible de acuerdo a lo que esté permitido en cada una de las áreas con el objetivo de que los recursos del turismo y del desarrollo sean procurados para garantizar la protección de las mismas.
Existen precedentes en toda la República, así como en Quintana Roo y Yucatán, de ANP que se han protegido con recursos a partir del turismo regulado y sostenible en alianza y colaboración con el gobierno.
Uno de ellos es la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an, que fue declarada ANP en 1986 y Patrimonio de la Humanidad en 1987 por la Unesco, por lo que es una de las áreas que se distinguen por sus importantes proyectos orientados a la conservación de la biodiversidad y desarrollo sustentable.
A partir de un esfuerzo inicial por diversificar las actividades económicas de las comunidades y en el área de influencia de Sian Ka’an, las cooperativas fueron capacitadas para prestar servicios turísticos, con un enfoque en objetos de conservación y desarrollo local y de preservación.
El proceso de planeación y visión de largo plazo fue clave para su éxito, incluyendo el contar con un Programa de Manejo que integra Programa de uso público, estudios de Capacidad de Carga y Límites de Cambio Aceptable como parte de las reglas administrativas.
El Parque Nacional Arrecifes de Cozumel es otro caso de éxito, ya que se le conoce como el Gran Arrecife Maya porque se encuentra la barrera de coral más grande del mundo y es el área donde se ha establecido una reserva de coral protegido.
De esta manera ayudan a recuperar y mantener en condiciones óptimas el ecosistema del arrecife, lo que permite que se pueda admirar su fauna marina, y disfrutar del buceo por medio de actividades controladas y responsables con el ambiente y gracias a la protección de esta parte de arrecife, es hogar de 300 especies de peces que habitan en los corales.
Estos casos son muestra de que con la alineación de objetivos específicos enfocados a la protección de estas zonas entre la IP, la sociedad civil y los tres niveles de gobierno, es posible lograr una regulación efectiva que permita no sólo proteger el ecosistema, sino generar recursos para mantener su conservación.
La Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres expresa su preocupación por la cancelación del visado electrónico para ciudadanos brasileños. Esta medida ha impactado negativamente en la industria turística de la región desde su implementación en agosto de 2022.
En una carta dirigida a Alicia Bárcena Ibarra, secretaria de Relaciones Exteriores, el presidente del sector, Jesús Almaguer Salazar, solicita la intervención de las autoridades para resolver esta situación que afecta la competitividad del país en el ámbito turístico, tanto regional como internacional.
La carta resalta la significativa disminución de turistas brasileños en Quintana Roo. En comparación con el año 2019, que recibió 396 mil turistas, en 2022 hubo una reducción de 110 mil visitantes, totalizando 285 mil.
Además, al comparar los primeros seis meses de 2019 con el mismo período en 2023, se observa una disminución de 97 mil turistas brasileños, pasando de 200 mil en 2019 a 102 mil en 2023.
Cada turista brasileño en México se aloja entre cinco y siete noches, generando ingresos significativos a través de impuestos y derechos como el DNR, ISH, DSA, IVA, entre otros, para los gobiernos federal, estatal y municipal.
Más que entrar en una competencia de números con presidentes anteriores, el gobierno actual haría bien en construir una estrategia en la materia en la que las áreas protegidas deben ser apenas una pieza más.
POR EUGENIO FERNÁNDEZ VÁZQUEZ X: @EUGENIOFV
El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, presumió el viernes que México tiene ya más de 200 áreas naturales protegidas que cubren en torno al 11 por ciento de la superficie terrestre y el 22 por ciento de la superficie marina del territorio nacional. Esto pondría a su gobierno, según explicó, camino de igualar al de Lázaro Cárdenas en cantidad de decretos emitidos. Es una buena noticia, pero que debe matizarse. Si el presupuesto de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) no deja de disminuir estos nuevos decretos no tendrán ningún impacto sobre el terreno. Tampoco hay que olvidar que la biodiversidad rebasa por mucho las fronteras de las áreas naturales protegidas y por tanto urge emprender medidas de conservación y restauración también fuera de ellas.
Mientras se registraba este aumento en la superficie que debe proteger Conanp, su presupuesto no hacía sino disminuir. Siguiendo un patrón ya establecido durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, que decretó la protección de cientos de miles de hectáreas al mismo tiempo que recortaba el presupuesto de Conanp, los proyectos de presupuesto de egresos de la Federación presentados al Congreso de la Unión desde 2018 han quitado dinero a la comisión un año tras otro. Los recortes no son menores: hoy Conanp tiene 32 por ciento menos dinero en términos reales que al iniciar este gobierno, para quedar en 983 millones 546 mil pesos en el proyecto de presupuesto de egresos para 2024.
En tiempos de recortes al sector ambiental se ha dicho que quitar presupuesto no afecta ni el resultado ni el desempeño de Conanp, porque en realidad los gobiernos anteriores habrían estado sumidos en el despilfarro y la corrupción. Más allá de si esto es cierto o no, el hecho es que el presupuesto de Conanp ya era insuficiente antes y lo sigue siendo. Si antes en muchos lugares el trabajo con Conanp a través, por ejemplo, de los programas de empleo temporal era una fuente de liquidez y un alivio económico para muchas comunidades dentro o alrededor de un área natural protegida, hoy en muchos sitios ocurre al revés y son las comunidades las que están invirtiendo su tiempo, recursos y esfuerzo en cuidar esas áreas, apoyando a Conanp.
Cuidar la biodiversidad de un país es mucho más que publicar decretos. Más que entrar en una competencia de números con presidentes anteriores, el gobierno actual haría bien en construir una estrategia en la materia en la que las áreas protegidas deben ser apenas una pieza más. El manejo forestal sostenible, la restauración de ecosistemas, el impulso de los productos agroforestales, el manejo de la vida silvestre y, en general, la potenciación de actividades económicas sustentables y regenerativas en zonas ambientalmente sensibles son apenas algunas de las acciones que deben impulsarse a la par de las nuevas reservas y santuarios.
Si lo que se quieren son metas claras a cumplir, se podría acelerar el proceso de construcción de las metas nacionales en relación con el Marco Mundial de Biodiversidad Kunming-Montreal, sumando a ellas a secretarías que hasta ahora no se vinculan directamente con lo ambiental, como la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural o la Secretaría de Bienestar. Todos saldríamos beneficiados con ello, y hacerlo sería también respetar y continuar el legado cardenista que hoy se quiere rescatar solamente sobre el papel.
El Gobierno Federal ha declarado recientemente nuevas Áreas Naturales Protegidas (APN), sin embargo, en los últimos años ha predominado el desarrollo inmobiliario irregular en Quintana Roo porque no tiene la facultad para hacer valer el derecho en materia de desarrollo regular pues las capacidades de vigilancia dentro de estas zonas es insuficiente para la conservación de los ecosistemas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador informó el pasado 6 de octubre que México tiene más de 200 ANP que cubren en torno al 11 por ciento de la superficie terrestre y el 22 por ciento de la superficie marina del territorio nacional, lo que ha llevado a la superficie protegida del país a 91 millones 608 mil hectáreas.
No obstante, la presión turística, los recortes al presupuesto de las instituciones ambientales y la falta de permisos a desarrollos inmobiliarios turísticos en Quintana Roo, ya reflejan sus consecuencias sociales y ambientales en destinos como Tulum y la Isla Grande de Holbox.
La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), encargada de administrar las ANP, ha sufrido de recortes al presupuestos mientras se decreta la protección de miles de hectáreas, pues los proyectos de presupuesto de egresos de la Federación presentados al Congreso de la Unión desde 2018 han quitado dinero a la dependencia año tras año.
Otra institución afectada por los recortes al presupuesto es la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Quintana Roo, lo que se ha reflejado en una importante disminución en sus capacidades de vigilancia al contar con únicamente dos inspectores en todo el estado, situación que ha sido aprovechada por el desarrollo turístico irregular.
Aunado a esto, en el estado también existe una imposibilidad de obtener los permisos de impacto ambiental por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que pueden incidir en el menor impacto ambiental de los proyectos, lo que la hace proclive a la ilegalidad.
Información de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA) reveló que en Quintana Roo solo 33.1% de los proyectos de desarrollo urbano y turísticos, entre el 2018 y 2022, fueron sometidos a una evaluación ambiental para determinar su impacto en el ecosistema y el otro 66% se realizó en la irregularidad.
Mientras que la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) región Sureste, señaló que obtener un permiso de construcción inmobiliaria en la entidad puede tardar de uno a dos años dependiendo el proyecto y actualmente hay más de 100 proyectos detenidos por esta situación.
Estas problemáticas se han arrastrado a destinos como Tulum, que no cuenta con un Programa de Manejo actualizado para establecer las reglas en materia de desarrollo inmobiliario al interior del polígono, lo que se ha traducido en asentamientos irregulares y falta de normas claras.
En 2015, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) cerró nueve proyectos turísticos ubicados dentro del Parque Nacional Tulum, Área Natural Protegida (ANP) desde 1981, por haber destruido ilegalmente sus ecosistemas, pero esas medidas no han sido suficientes.
De hecho, ante la creciente demanda turística, la cifra de desarrollos habitacionales inscritos en Tulum se quintuplicó en 2021, al pasar de 123 en mayo de 2020 a 625 en la actualidad, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI).
Mientras que en la Isla de Holbox, declarada ANP desde 1994, la situación es la misma al enfrentar graves desafíos ambientales y la pérdida de su esencia natural debido a su popularidad turística y la falta de regulación efectiva, lo que ha propiciado un auge de construcción descontrolada y fuera de la norma.
El Grupo Ecologista del Mayab (GEMA) advirtió en 2020 sobre la construcción de inmuebles turísticos y privados en la reserva, sin permisos y sin las autorizaciones de impacto ambiental por parte de la Semarnat y la falta de inspección y vigilancia de la Profepa.
Un claro ejemplo de un desarrollo inmobiliario que no cumple con las normas, es Shanti Holbox, un proyecto de 120 terrenos en las playas de Punta Mosquito, que son vendidos como mini lotes, pero aunque son presentados como autosustentables, están fuera de toda regulación y no cuentan con autorización de impacto ambiental de la Semarnat.
¿El desarrollo sustentable se puede lograr con éxito?
Los decretos de ANP, sobre todo en Quintana Roo, deben estar acompañados de una estrategia que incentive el desarrollo sostenible de acuerdo a lo que esté permitido en cada una de las áreas con el objetivo de que los recursos del turismo y del desarrollo sean procurados para garantizar la protección de las mismas.
Existen precedentes, tanto en Quintana Roo como en Yucatán, de Áreas Naturales Protegidas que se han protegido con recursos a partir del turismo regulado y sostenible en alianza y colaboración con el gobierno.
Uno de ellos es la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an, que fue declarada ANP en 1986 y Patrimonio de la Humanidad en 1987 por la Unesco, por lo que es una de las áreas que se distinguen por sus importantes proyectos orientados a la conservación de la biodiversidad y desarrollo sustentable.
A partir de un esfuerzo inicial por diversificar las actividades económicas de las comunidades y en el área de influencia de Sian Ka’an, las cooperativas fueron capacitadas para prestar servicios turísticos, con un enfoque en objetos de conservación y desarrollo local y de preservación.
El proceso de planeación y visión de largo plazo fue clave para su éxito, incluyendo el contar con un Programa de Manejo que integra Programa de uso público, estudios de Capacidad de Carga y Límites de Cambio Aceptable.
El Parque Nacional Arrecifes de Cozumel es otro caso de éxito, ya que se le conoce como el Gran Arrecife Maya porque se encuentra la barrera de coral más grande del mundo y es el área donde se ha establecido una reserva de coral protegido.
De esta manera ayudan a recuperar y mantener en condiciones óptimas el ecosistema del arrecife, lo que permite que se pueda admirar su fauna marina, y disfrutar del buceo por medio de actividades controladas y responsables con el ambiente y gracias a la protección de esta parte de arrecife, es hogar de 300 especies de peces que habitan en los corales.
Estos casos son muestra de que con la alineación de objetivos específicos enfocados a la protección de estas zonas entre la sociedad civil y los tres niveles de gobierno, es posible lograr una regulación efectiva que permita no sólo proteger el ecosistema, sino generar recursos para mantener su conservación.
A pesar de que el Gobierno Federal ha declarado nuevas Áreas Naturales Protegidas (APN), en los últimos años ha prevalecido el desarrollo inmobiliario irregular en Quintana Roo debido a que no tiene la facultad para hacer valer el derecho en materia de desarrollo regular porque las capacidades de vigilancia dentro de estas zonas es insuficiente para la conservación de los ecosistemas.
El presidente Andrés Manuel López Obrador informó el pasado viernes 6 de octubre que México tiene más de 200 ANP que cubren en torno al 11 por ciento de la superficie terrestre y el 22 por ciento de la superficie marina del territorio nacional, lo que ha llevado a la superficie protegida del país a 91 millones 608 mil hectáreas.
No obstante, la presión turística, los recortes al presupuesto de las instituciones ambientales y la falta de permisos a desarrollos inmobiliarios turísticos en Quintana Roo, ya reflejan sus consecuencias sociales y ambientales en sus destinos más importantes, tales como Tulum y la Isla Grande de Holbox.
De la misma manera que en la anterior administración, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP), encargada de administrar las ANP, ha sufrido de recortes al presupuestos mientras se decreta la protección de miles de hectáreas, pues los proyectos de presupuesto de egresos de la Federación presentados al Congreso de la Unión desde 2018 han quitado dinero a la dependencia año tras año.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) en Quintana Roo, es otra institución afectada por los recortes al presupuesto lo que se ha reflejado en una importante disminución en sus capacidades de vigilancia al contar con únicamente dos inspectores en todo el estado, situación que ha sido aprovechada por el desarrollo turístico irregular.
Aunado a esto, en el estado también existe una imposibilidad de obtener los permisos de impacto ambiental por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), que pueden incidir en el menor impacto ambiental de los proyectos, lo que la hace proclive a la ilegalidad y que los proyectos inmobiliarios clandestinos rebasen los límites establecidos en la normatividad.
De acuerdo con información de la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA), en Quintana Roo solo 33.1% de los proyectos de desarrollo urbano y turísticos, entre el 2018 y 2022, fueron sometidos a una evaluación ambiental para determinar su impacto en el ecosistema y el otro 66% se realizó en la irregularidad.
Datos de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI) región Sureste, señalan que obtener un permiso de construcción inmobiliaria en la entidad puede tardar de uno a dos años dependiendo el proyecto y actualmente hay más de 100 proyectos detenidos por esta situación.
Estas problemáticas se han arrastrado a destinos como Tulum, que no cuenta con un Programa de Manejo actualizado para establecer las reglas en materia de desarrollo inmobiliario al interior del polígono, lo que se ha traducido en asentamientos irregulares y falta de normas claras.
En 2015, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) cerró nueve proyectos turísticos ubicados dentro del Parque Nacional Tulum, Área Natural Protegida (ANP) desde 1981, por haber destruido ilegalmente vegetación de tierras bajas, matorrales y dunas costeras, pero esas medidas no han sido suficientes para impedir que surjan nuevos proyectos inmobiliarios sin permisos ambientales.
De hecho, ante la creciente demanda turística, la cifra de desarrollos habitacionales inscritos en Tulum se quintuplicó en 2021, al pasar de 123 en mayo de 2020 a 625 en la actualidad, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI).
Mientras que en la Isla de Holbox, declarada ANP desde 1994, la situación es la misma ante la presión turística, al enfrentar graves desafíos ambientales y la pérdida de su esencia natural debido a su popularidad turística y la falta de regulación efectiva, lo que ha propiciado un auge de construcción descontrolada y fuera de la norma.
El Grupo Ecologista del Mayab (GEMA) advirtió en 2020 sobre la construcción de inmuebles turísticos y privados en la reserva, sin permisos, estudios y sin las autorizaciones de impacto ambiental por parte de la Semarnat y la falta de inspección y vigilancia de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
Un claro ejemplo de un desarrollo inmobiliario que no cumple con las normas, es Shanti Holbox, un proyecto que consta de 120 terrenos en las playas de Punta Mosquito, que son vendidos como mini lotes, pero aunque son presentados como autosustentables y sostenibles, están fuera de toda regulación y no cuentan con autorización de impacto ambiental de la Semarnat.
Desarrollo sostenible: ¿se puede lograr con éxito?
Para garantizar el cuidado de los ecosistemas en Quintana Roo, los decretos de ANP deben estar acompañados de una estrategia que incentive el desarrollo sostenible de acuerdo a lo que esté permitido en cada una de las áreas con el objetivo de que los recursos del turismo y del desarrollo sean procurados para garantizar la protección de las mismas.
Existen precedentes, tanto en Quintana Roo como en Yucatán, de Áreas Naturales Protegidas que se han protegido con recursos a partir del turismo regulado y sostenible en alianza y colaboración con el gobierno.
Uno de ellos es la Reserva de la Biosfera Sian Ka’an, que fue declarada ANP en 1986 y Patrimonio de la Humanidad en 1987 por la Unesco, por lo que es una de las áreas que se distinguen por sus importantes proyectos orientados a la conservación de la biodiversidad y desarrollo sustentable.
A partir de un esfuerzo inicial por diversificar las actividades económicas de las comunidades y en el área de influencia de Sian Ka’an, las cooperativas fueron capacitadas para prestar servicios turísticos, con un enfoque en objetos de conservación y desarrollo local y de preservación.
El proceso de planeación y visión de largo plazo fue clave para su éxito, incluyendo el contar con un Programa de Manejo que integra Programa de uso público, estudios de Capacidad de Carga y Límites de Cambio Aceptable como parte de las reglas administrativas.
El Parque Nacional Arrecifes de Cozumel es otro caso de éxito, ya que se le conoce como el Gran Arrecife Maya porque se encuentra la barrera de coral más grande del mundo y es el área donde se ha establecido una reserva de coral protegido.
De esta manera ayudan a recuperar y mantener en condiciones óptimas el ecosistema del arrecife, lo que permite que se pueda admirar su fauna marina, y disfrutar del buceo por medio de actividades controladas y responsables con el ambiente y gracias a la protección de esta parte de arrecife, es hogar de 300 especies de peces que habitan en los corales.
Estos casos son muestra de que con la alineación de objetivos específicos enfocados a la protección de estas zonas entre la sociedad civil y los tres niveles de gobierno, es posible lograr una regulación efectiva que permita no sólo proteger el ecosistema, sino generar recursos para mantener su conservación.
La época de bioluminiscencia es de abril a noviembre, siendolos meses calurosos donde más visible se vuelve debido a que el agua está más caliente.
Este fenómeno natural es producto de una reacción bioquímica entre la flora y fauna marina y la enzima de nombre luciferasa, lo que provoca que el mar se vea azul turquesa fosforescente y tenga luz propia.
Los organismos responsables de las espectaculares vistas son: gusanos, moluscos, crustáceos, insectos, peces, bacterias, hongos, protistas unicelulares y medusas.
La bioluminiscencia es un fenómeno que se presenta en todo el mundo como Nueva Zelanda, Australia, Colombia y Jamaica.
En nuestro país se presencia en varias playas que logran la oscuridad necesaria, es decir el mar está alejado de la luz artificial de la costa y no hay presencia de luna nueva en el cielo, pues el brillo de la misma impediría se notara a simple vista el espectáculo.
Los 3 destinos mexicanos y no los únicos pero sí los más hermosos con presencia de bioluminiscencia son:
A inicios del mes, la gobernadora electa de Quintana Roo, Mara Lezama Espinosa, anunció en sus redes sociales el inicio de los trabajos en el segundo tramo de la remodelación del bulevar Colosio, la cual incluye la instalación de una red de gas natural.
Esto traerá beneficios a la entidad, pues al ser un combustible más económico los quintanarroenses lo verán reflejado en sus facturas, además de ser más seguro.
Dicha etapa comprende entre la Universidad La Salle y la subestación de la Comisión Federal de Electricidad. De la misma manera se dieron a conocer las vías alternas, las cuales son la Avenida Álamos, Sierra Madre, Los Olivos, Nazareth, Avenida Colegios y Chapultepec.
La obra presenta un avance de 10.63 por cierto, a casi un mes y medio de haber comenzado con la remodelación, los trabajos continúan 24/7 para cumplir con la fecha de entrega, cumpliendo con todos los estándares de seguridad.
Durante la segunda semana de septiembre, el sector turístico, a través de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres, así como los empresarios del sector en la Riviera Maya y la Asociación de Agencia de Viajes de Cancún, han comunicado que la remodelación no ha causado impacto negativo a sus actividades.
Esto debido a que han tomado todas las recomendaciones brindadas por las autoridades, respecto a vías alternas.
Con la remodelación del Bulevar Colosio, se tendrá mejoras en la infraestructura, mediante la utilización del material adecuado, como lo es el concreto hidráulico, dentro de sus diversas ventajas que presenta para las y los ciudadanos.
Puede tolerar altas temperaturas, sin sufrir modificación alguna. Además de ser adecuado para lugares donde la mayor parte del año cuenta con climas mayormente húmedos y lluvias constantes.
Lo anterior no representa un riesgo para la población, debido a que el concreto hidráulico cuenta con una superficie antiderrapante, lo que ayudará a disminuir los accidentes automovilísticos en el estado.
Gas natural: un verdadero beneficio
De igual manera, se ha comenzado con la instalación de las redes de los ductos de gas natural, dicho proyecto cuenta con todo el respaldo de los tres niveles de gobierno, además de una gran inversión de la administración federal.
La ampliación de los ductos de gas natural, tienen la finalidad solucionar no solo de manera inmediata diversos aspectos dentro de la población, por el contrario se busca que los beneficios tengan una duración a largo plazo.
De primera mano, dar un gran golpe a la venta clandestina de gas LP a manos de grupos criminales, que solo buscan un beneficio económico dejando en un gran riesgo a la población.
Además de brindar una mayor protección a la economía de las familias, al brindar menores costos con el gas natural, y una mayor tranquilidad para su uso, debido al no requerir un tanque para su contenido, los riesgos de explosión son menores en comparación con el gas LP.