Así como los humanos, los perros poseen su propia personalidad que muchas veces está determinada por la raza a la que pertenecen.
Aunque es verdad que tener un lomito es mucho más demandante que tener cualquier otra mascota, la satisfacción de su compañía es la mejor de todas las pagas.
Existen algunas características que todos los perros poseen como la necesidad de agruparse con otros animales o humanos, poseer muy buen olfato y que todos son carnívoros, pero algunos comportamientos que no son naturales y aunque la mayoría pueden resolverse en casa, existen otros en los que es necesaria la intervención de un psicólogo de perros (etólogo) o entrenador profesional.
A continuación, te dejamos tres conductas que indican que tu perro tiene un trastorno de comportamiento:
- Agresividad desmedida; es cierto que hay algunas razas de perros que son más agresivas que otras, pero lamentablemente la mayoría de los dueños prefieren deshacerse del perro cuando mordió a un niño o a un adulto mayor, que investigar las causas de este comportamiento. Las causas principales son el miedo o el dolor, tal vez el perro percibe cierto rechazo de su dueño, no aprendió a socializar de manera correcta con humanos u otras mascotas o tiene alguna parte de su cuerpo comprometida.
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- Masticado obsesivo; si el animal no para de morder cosas como zapatos, muebles, artículos de limpieza, peluches entre otras, aún teniendo sus propias mordederas especiales para perros, es un signo de que está sufriendo de ansiedad, es importante la ayuda veterinaria en este caso porque esta obsesión por morder podría provocar que se coma una piedra o un objeto que no pueda digerir.
- Tristeza extrema tras separación; si tuviste que salir unas horas o días de la casa y al regresar tu perro está totalmente deprimido sin ánimos de salir y con un tipo de “ley del hielo” contra ti, significa que tiene apego ansioso que no es lo suficientemente independiente como para vivir sin tu compañía, esto más que parecer una escena romántica es un trastorno de conducta.
MGG
