Leticia Vélez es una estudiante universitaria de 20 años y activista desenvuelta que desde niña acompañó a su madre a manifestaciones, marchas y protestas a favor de la causa de los inmigrantes que están en Estados Unidos sin permiso. Hace poco tomó la palabra durante una conferencia de prensa en el ayuntamiento de Los Ángeles.
Nacida en Ciudad de México, podría acogerse al programa ejecutivo que deja en suspenso las deportaciones de los «dreamers», como se denomina a los jóvenes que fueron traídos al país ilegalmente cuando eran menores, pero no lo ha hecho. Tampoco su hermano Ricardo, de 18 años.
Ambos son parte de una familia humilde y salen adelante como pueden. Reciclan latas y botellas y preparan pozole, tacos y otros platillos mexicanos que venden a los trabajadores del vecindario, pero no han logrado reunir el dinero para poner el trámite en marcha.
«He estado tratando de juntar dinero para los gastos de la universidad, la renta, el permiso migratorio. Son muchas cosas a la vez, así que decidimos enfocarnos en pagar la renta», explicó la muchacha, que todavía no ha elegido una carrera pero contempla ser actriz o activista a tiempo completo. «Es difícil. Cada centavo cuenta».
Igual que los hermanos Vélez, numerosos dreamers no se han acogido al programa que entró en vigor en agosto de 2012 por falta de dinero u otros motivos, incluida desinformación o temor a ser deportados si esos programas son anulados en el futuro.
Se desconoce cuántos inmigrantes están en la misma situación que los Vélez, pero desde que entró en vigor el programa y hasta febrero de este año se habían recibido 770.338 solicitudes, de las cuales 639.000 fueron aprobadas, 50.000 estaban siendo estudiadas y 80.000 fueron denegadas, según la oficina de Servicios de Ciudadanía e Inmigración.
Esto quiere decir que cientos de miles de jóvenes no han presentado solicitudes para acogerse al programa, ya que el Centro de Investigaciones Pew calcula que hay 1,7 millones de dreamers que podrían ser cobijados por las órdenes ejecutivas.
Vélez dice que ha tratado de ahorrar desde que terminó la secundaria en 2012 pero no ha podido. Su hermano Ricardo tampoco.
Los dos viven con la madre y otro hermanito de 11 años en una casa modesta de Los Ángeles, apretada entre negocios y camiones. Vélez dice que ha tenido un «cachuelito» (trabajito) por aquí y por allá pero que cuesta compaginar el trabajo con los estudios y el salario de su madre, Leticia Soto, quien limpia oficinas, no alcanza para todos.
Su hermano terminó la secundaria el año pasado y también se puso a trabajar con uno de sus tíos instalando baldosas, pero aun así tampoco han podido ahorrar, dice Vélez.
Muchos de los que todavía no han solicitado el beneficio serían menores que no han terminado la secundaria y no necesitan los documentos. Abundan también los inmigrantes que no tienen dinero para la solicitud, legalizaron su estatus de otra manera, tienen miedo de pedir el beneficio porque creen que no son aptos, regresaron a su país de manera voluntaria o fueron deportados.
De acuerdo con Luis Pérez, director of servicios legales de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes en Los Ángeles, CHIRLA por sus siglas en inglés, las principales razones por las muchos no han solicitado el beneficio o recién lo están haciendo parecen ser la falta de dinero e información sobre préstamos disponibles, la creencia de que no son aptos y la demora en reunir los documentos necesarios.
«Cuando vienen a vernos, ya tienen todo. Vienen para comenzar el trámite. Aquí se enteran de que hay préstamos disponibles y dicen, `oh, de haberlo sabido antes’», dijo Pérez.
Esta es la situación de Vélez, quien no sabía que había préstamos específicos para el plan de Obama, ofrecidos mayormente por entidades pequeñas como el Frente Indígena de Organizaciones Binacionales, que aboga por los derechos de los indígenas en California.
Odilia Romero, directora ejecutiva de la organización, dijo que sirve mayormente a personas cuya lengua natal es indígena, así como también a madres solteras, jornaleros, mecánicos, vendedores ambulantes e inmigrantes sin autorización que ganan en efectivo o tienen problemas para probar sus ingresos por falta de documentos.
«Hace un mes vino un dreamer que venía (a acogerse al plan) por primera vez. Era un joven que tenía familia y trabajaba, pero no tenía el dinero suficiente. Llegó para pedir prestados 600 (dólares)», dijo Romero. «Son gente que no está en la economía formal. Si vendes frutas, te va bien hoy y mañana no. Entonces, priorizas de acuerdo a tu economía. A veces te alcanza solo para sobrevivir y es un lujo (solicitar el permiso de trabajo)».
Los préstamos para dreamers son mayormente de entre 465 dólares, el costo de la solicitud, y 1.000 dólares, con intereses altos, por ser de alto riesgo, de alrededor de 10%, 15% e incluso 30%. Las entidades prestamistas trabajan con organizaciones establecidas que defienden la causa de los inmigrantes sin visa, como CHIRLA.
Un préstamo es lo que también está considerando Edgar González, quien tampoco ha podido ahorrar dinero para su solicitud.
«Creo que podría vivir mejor (si tuviera permiso para trabajar), pero vivo mes a mes», dijo el joven de 22 años, quien gana alrededor de 1.000 dólares al mes trabajando 40 horas semanales en McDonald’s.
Su nena Vivian, de 11 meses, duerme en el cuarto, mientras un ventilador despeja el aire caliente de la sala atiborrada de cajas con pertenencias de su cuñada, que se va a quedar por un tiempo en su apartamento de un cuarto en el Sur de Los Ángeles, por el que paga 750 dólares.
«Allí van a ir mis ingresos ahora», dijo González mirando las cajas y una cama improvisada en su sala.
El inmigrante nacido en Michoacán, México, renta el apartamento con su novia, Melina Ramírez, una dreamer que ya tiene permiso de trabajo y gana unos 1.300 dólares al mes trabajando 40 horas semanales como supervisora en McDonald’s.
«Todo se va en la renta, las utilidades (servicios públicos), el carro, la comida», dice González, quien llegó al país a los 9 años en el 2001 y terminó la secundaria en 2011.
Al igual que Vélez, González no se ha quedado de manos cruzadas y está procurando mejoras para él y otros inmigrantes. Ambos son parte de Kids Over Politics, campaña del Sindicato Internacional de Empleados de Servicio para crear conciencia sobre asuntos laborales y derechos humanos y civiles.
«Hacemos todo lo que podemos, pero a veces no es suficiente», puntualizó González.
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Miles de dreamers no se han legalizado
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Alejandro Poiré y legalizar las drogas
Desde hace tiempos e habla sobre la legalización de las drogas en México y hace unas horas el vocero en materia de seguridad del gobierno federal simplemente dijo que legalizar las drogas no es viable.
¿Cómo sabe?, me gustaría mucho en el mejor de los planes que las declaraciones rescatadas a personas así que son voceros, se acompañaran de estudios o simplemente cifras y razones, no solo la descalificación por la descalificación misma.
Hay una razón que él ha venido manejando que es la de que los criminales no sólo se dedican al narcotráfico, valido, sé que es así, es más, pensar que el Chapo Guzmán o el Mayo Zambada o la Familia Michoacana o no sé, los Zetas o el Cartel Independiente de Acapulco o el del Golfo, solo se dedican a transportar al mercado más grande de estupefacientes (Estados Unidos por si usted o alguno de mis apreciables lectores no saben) en el Mundo, las drogas.
Se dedican a la extorsión, cobro de cuentas, cobro de seguridad, de uso de piso, secuestro y robo.
Pero nada es tan jugoso como el narcotráfico, si desarticulamos un poco su financiamiento y legalizamos o toleramos ya un poco las drogas, simplemente vamos quitándoles la gallina de los huevos de oro y de ahí, podemos ir restándoles poder en otros rubros.
Pero espero que Alejandro Poiré, vocero de seguridad nacional, pueda dar un poco mas de información sobre sus ideas expresadas.
Texto escrito por El Enigma
Analista consultor en riesgos financieros y económicos, editor en jefe de atomilk.com y Sumayresta.net -
¿México puede debatir despenalizar el uso de drogas?
México está preparado para debatir sobre la legalización de las drogas, pero ese camino no debe transitarlo de manera aislada, dijo en Michoacán la ex candidata presidencial Patricia Mercado Sánchez
Para Mercado Sánchez, en México ya está despenalizado el debate pero se necesita agendas comunes con Centroamérica, Estados Unidos, Colombia y Bolivia.
Patricia Mercado, quien desde su campaña por la Presidencial de la República en el 2006, se pronuncia abiertamente por legalizar el consumo de estupefacientes, dijo que México debe tomar el ejemplo de otras naciones para combatir con inteligencia al crimen organizado.
Mercado Sánchez se suma a las voces que ubica a México como un país preparado para ser gobernador por una mujer; destaca a Beatriz Paredes del PRI, Amalia García del PRD y Josefina Vázquez del PAN.
La también Presidenta de un Instituto de liderazgo, estuvo en el Colegio de San Nicolás de Hidalgo, para participar como ponente en el foro denominado por la salud la vida y el derecho de las mujeres
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FCH en contra de legalizar drogas, ¿y el debate?
El presidente Felipe Calderón se pronunció en contra de la legalización de las drogas, durante una entrevista en Colombia.
«Yo no estoy de acuerdo con la legalización. No estoy de acuerdo porque si uno analiza, uno debe poner en la balance ese debate, las ventajas y las desventajas de una medida como ésa», señaló en entrevista con Radio Caracol.
Calderón argumentó que «si se legaliza, por ejemplo el precio tan alto que tienen las drogas en el mercado negro se reduciría y eso reduciría la capacidad financiera de los criminales, puede ser cierto, pero liberar totalmente el mercado de drogas , incluso la propia reducción de su precio, son dos factores que vana impulsar a millones y millones de jóvenes a consumir drogas».
Además, el titular del Ejecutivo aseguró que la lucha que Colombia realizó contra el narcotráfico es «una gran lección para mí y para México». «En el momento en que Colombia se decidió a confrontar con determinación a los criminales, el crimen comenzó a ceder y comenzó a ganar el Estado», dijo
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SEP en contra de legalizar las drogas
El secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, fijó la postura de la dependencia respecto a la legalización de las drogas y agregó que estas no deben llegar a los niños.
Entrevistado en el Senado, Lujambio detalló que â??a mi juicio es importante que se vea a la luz del interés de la niñez mexicana, sería verdaderamente inquietante que nuestros niños se acercaran a las drogas y que las percibieran como algo permitidoâ?, alertó el funcionario.
Lujambio acudió al Senado a presentar el libro â??Arquitectura Legislativaâ?, en un evento presidido por el perredista Carlos Navarrete y al que acudió la directora de Conaculta, Consuelo Sáizar.
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Ramirez Acuña saluda debate por legalizar drogas
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Francisco Ramírez Acuña, respaldó al presidente Felipe Calderón en su llamado al diálogo, para hacer una revisión profunda en la estrategia en contra del crimen organizado.
«Queda de manifiesto que está en las mejores condiciones de aceptar las propuestas y proyectos de modificación de la estrategia en materia de Seguridad Pública», sostuvo en entrevista.
Calificó de realistas las declaraciones del titular del Ejecutivo, en el sentido de que el narco no tiene límites ni escrúpulos.
«Es una condición realista, cuando todos observamos que es un monstruo de mil cabeza y por más que se cortan surgen otras y evidentemente es la tarea que debemos dar coordinada y definida», acotó.
Por lo anterior, refrendó que el diálogo nunca debe claudicar ni cerrarse sino, por el contrario incrementarse, pues a través de él «podemos hacer las sugerencias correspondientes».
«Y en este caso hay un buen receptor y nos vamos a poner a dialogar con él para manifestarle en lo que no coincidimos y sugerir lo que creemos que se debe hacer», concluyó