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  • Tacos «Los especiales»

    En lo que es la entrada de los billares Centro Histórico desde hace tres años llegó Javier Moreno, instaló sillas y mesas, todo de acero inoxidable incluyendo las «canastas» donde llevan los tacos envueltos en el típico plástico azul. Se llaman Los Especiales.

    Desde las ocho de la mañana y hasta las ocho de la noche van y vienen los taqueros en sus bicicletas, dos para empezar y de ahí una cada hora hasta acabr el día. Así queda resuelto el mayor problema de los tacos de canasta es que siempre están en movimiento y justo cuando uno encuentra unos de buen sabor y bien servidos resulta que ya se movieron, y si es habitual que se pongan en una esquina tiene que esperar a ver a que hora llega o quedarse con el antojo porque ya se fue.

    La higiene es lo principal para Javier y su socio Miguel Quiroz, por eso las canastas son de acero. Si bien el precio es más elevado que el promedio de los tacos sudados, $4 pesos por cada uno, son bien llenadores, pues son del tamaño de dos tortillas. Y está bien servidos. Los rellenos son los típicos: Frijol, papa, adobo, chicharrón y mole verde.

    Javier llegó el año del terremoto, en ese 1985 salió de Tlaxcala rumbo a la ciudad de México, tenía apenas 17 años. San Miguel Pipillola es un pueblito de apenas 500 habitantes, obvio todos se conocen y antes que Javier, a la capital del país había llegado Ángel Quiroz quien era dueño de una fábrica de tacos de canasta donde empleo a su paisano. Desde las tres de la mañana empieza la actividad en la fábrica para cocinar los rellenos. A las cinco llegan a lavar el puesto y a las 8 ya puede usted desayunarse unos de papa o de frijol en ésta temprada de vigilia.

    El guacamole acompañado de cebolla morada merece una mención especial, pero también puede acompañar sus taquitos con los ya habituales chiles en escabeche, que aunque no están en un tarró de mayonesa siguen siendo los inseparables de los de canasta.

    ¿Cómo llegar? Tacuba 81 esquina con Palma en el Centro histórico, cerca metro Allende o Zócalo

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  • Los sopes de Luis Espota (antes, avenida 9)

    Si uno se come dos sopes, dos aguas y todaví­a tiene estómago para entrarle al postre la cuenta será bastante alta. Es más si uno entra de primera vez pensará â??¡zaz! a ver si me alcanzaâ?. Sin embargo a pesar de su reciente remodelación Los Sopes de la Nueve siguen estando al alcance del bolsillo.

    La familia H. Inició el negocio con una tienda de abarrotes ubicada en la entonces llamada calle nueve, hoy Luis Spota.

    Para promocionar sus productos sacaron un comal y empezaron a vender sopes. â??Vendí­an sopes de cosas que ni te imaginabas, como por ejemplo de jamónâ?, comenta la señorita H H, actual administradora del local.

    Fue tal el éxito de los sopes que cerraron la cremerí­a y metieron el comal, afuera habí­a una barra y la gente se sentaba en la banqueta o se recargaba en un árbol â??muy cómodoâ? que estaba enfrente. Y como le pasa a uno con estos sopes, pues ya no cabí­an pero querí­an más, así­ que decidieron mudarse a un local más grande. De nueva cuenta la gente lo llenó y durante la pasada crisis de la H1N1, se deshicieron del estacionamiento y de 12 mesas pasaron a 36.
    Ahora también venden sopes impensables, como el de carnero con chiles toreados ($39), suadero con chorizo ($38), camarón o filete de pescado, ahora si lo prefiere en lugar de tortilla se lo pueden servir sobre un nopal, por aquello de la dieta. Pero si no le gustan los sopes puede pedir ensalada de frutas, jugos o aguas naturales. Y si de plano trae cargando la cruz a cuestas pues una cerveza y un caldito o unos chilaquiles con carne asada.
    La idea, comenta la administradora, es que la gente encuentre de todo, â??entre semana se llena de oficinistas y trabajadores de la construcción y entre semana de familias, así­ que nos gusta que tengan de donde escogerâ?

    ¿Dónde están? Av. Luis Spota No.85 Col. Independencia, cerca de eje Central, Tlalpan y eje 6, a 5 calles de metro Nativitas. Con una sucursal en Plutarco Elí­as Calles No.1642

  • El Gallo Giro, tacos que hay que conocer

    Veinte minutos antes de que llegue Luis Aguilar ya hay gente esperando. La fila es larga, pero no esperan al Gallo Giro, sino al otro que también es famoso y vende tacos de guisado enfrente de la gasolinera de Plaza Inn. Sus recetas no son las de Chonita sino las de doña Maria Luisa Gómez, la abuela de sus esposa Laura.

    De ver la fila da flojera formarse, pero algo bueno espera al final. Desde que saca el pizarrón con los 20 guisados del dí­a la cosa se pone interesante: los clásicos son la pechuga empanizada, la milanesa, los chiles rellenos y la cochinita pibil.

    Pero lo mismo puede uno encontrar moles con pollo, manitas de puerco en chile verde, higado encebollado, pollo a la mostaza y más de 60 platillos que varí­an dí­a a dí­a o que pueden ordenarse para una fiesta o banquete.
    Pero váyase con cuidado. Al pedir el primer taco de mole verde se sorprenderá que por apenas 11 pesos don Luis le ponga una pierna de pollo, se la bañe con el mole, y le sirva una cucharada grande de arroz, frijoles o espagueti blanco, aunque este último va mejor con los capeados o los empanizados. Ahora, que si prefiere, puede pedir la comida completa que â??por 30 pesos le pongo arroz o espagueti, frijoles un guisado tortillas y salsa; y por 35 pesos le sirvo dos guisadosâ?.
    El negocio lo empezaron él y su esposa en el 97. Luis estudio derecho y su esposa contabilidad â??pero nos casamos en el 91, y nos dedicamos a trabajarâ?.

    Y en qué otra cosa que el negocio familiar de su mujer. Su abuela tení­a merenderos en Guanajuato y de ahí­ vienen las recetas, ninguna está escrita, todas son de memoria, las más de 60.

    â??Le aprendí­ a mi mamá, pero no creas que me dio las recetas: fue viendo, oliendo, probando y ayudándole en la cocinaâ?, comenta sonriente y orgullosa la cocinera. Con semejante banquete, seguro, don Luis le querra dar una cuchara o tenedor para comerse el taco. Pero le recomiendo que diga que no, que lo rechace y al final, triunfalmente, se chupe los dedos