Etiqueta: chalk

  • Que son las metanfetaminas

    Guardan una estrecha relación quí­mica con las anfetaminas, pero sus efecto en el sistema nervioso central es mayor. Aunque ambos productos tienen algunos usos médicos, su uso debe estar perfectamente controlado y fundamentado.

    La droga fue desarrollada en Japón en 1919 y utilizada ampliamente por los soldados nipones, particularmente por los kamikazes, en la Segunda Guerra Mundial.

    Las metanfetaminas se fabrican en laboratorios ilegales y se presentan como un polvo blanco, cristalino, sin olor y con sabor amargo que se disuelve fácilmente en agua o licor.

    Se les conoce en el mercado de drogas como: arranque (crank), anfetas, cristal, chalk, hielo (ice), speed, meth, meta, tiza o vidrio (glass).

    La metanfetamina se administra por ví­a oral o intranasal, es decir mediante la inhalación del polvo. También se inyecta por ví­a intravenosa y se fuma y se incorpora rápidamente al cerebro.

    Las metanfetaminas actúan en el cerebro, liberanado altos niveles del neurotransmisor conocido como â??dopaminaâ?, que estimula las células cerebrales y mejora el estado de ánimo y los movimientos del cuerpo, sin embargo, también parece tener un efecto neurotóxico, que daña las células cerebrales que contienen â??dopaminaâ? y â??serotoninaâ? que es otro neurotransmisor.

    Es una droga que genera adicción desde su inicio y con el tiempo y el uso constante, la reducción de los niveles de dopamina en el cerebro ocasionan sí­ntomas parecidos a los de la enfermedad de Parkinson, un trastorno grave que afecta el control del movimiento.

    Inmediatamente después de la inhalación o la inyección intravenosa, el usuario experimenta una intensa sensación conocida como «rush» o «flash» (arrebato o fogonazo), que dura unos minutos dando una sensación de placer. El uso oral o intranasal produce euforia.

    Entre sus efectos inmediatos en el sistema nervioso central están la prolongación del estado de vigilia, mayor actividad fí­sica, reducción del apetito, aumento de la frecuencia respiratoria, hipertermia y euforia. Otros efectos incluyen irritabilidad, insomnio, confusión, temblores, convulsiones, ansiedad, paranoia y agresividad. La hipertermia y las convulsiones pueden causar la muerte.

    Además, las metanfetaminas provocan problemas respiratorios, aumentan la frecuencia cardiaca y la tensión arterial y puede causar lesiones irreversibles de los vasos sanguí­neos cerebrales y provocan anorexia extrema. Su uso puede ocasionar colapso cardiovascular y muerte instantánea.

    También los adictos pueden experimentar varias caracterí­sticas psicóticas, como la paranoia, alucinaciones auditivas, ánimo alborotado y delirio, además de sensaciones como que insectos les caminan sobre la piel. Además pueden tener pensamientos de homicidio y/o de suicidio.

    Otro riesgo que conlleva es el uso compartido de agujas lo que además incrementa el riesgo de la transmisión de VIH, SIDA y otras enfermedades graves.

    Existen algunas razones médicas aceptables para el uso de esta droga, como el tratamiento de la narcolepsia, el desorden por déficit de atención, y para uso, a corto plazo, del control de la obesidad; pero estos usos médicos son limitados