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  • La estética de la enfermedad

    los problemas del enfermo en su enfermedad

    Por: Edgar Alejandro Moreno Dí­az

    El estar enfermo presenta una fuerte carga fí­sica, mental y emocional, tanto para el que la padece como para los que lo rodean. Esta carga posteriormente genera un desgaste de las facultades previamente mencionadas. Con las capacidades desgastadas, se crean sentimientos ocultos como la ira, la tristeza y la desesperación, que posteriormente pasan a formar parte de una frustración. Con tales motivos planteo la siguiente hipótesis: los sentimientos furtivos enmarcados en la historia de Escenas de ira, tristeza y desesperación con momentos felices (2010) de Ethel Kolteniuk Krauze son el resultado de la estética de la enfermedad. La enfermedad se caracteriza por la ruptura del perfecto equilibrio en el cuerpo, y cuando caemos en ésta la tomamos como un castigo por alguna acción mal encaminada o una carga que no nos corresponde. Para conducir acertadamente mi propuesta utilizaré la teorí­a expuesta en la Teorí­a y técnica del cuento (1999) de Enrique Anderson Imbert y en Arte y sociedad (2006) de Roger Bastide. La estética no solo indica a la belleza como la mayorí­a cree, también se refiere a los contextos culturales que se forman con el paso del tiempo. Lo anterior señala que la estética depende del ámbito social en el que nos encontremos, por tanto lo que es considerado como bueno para algunos grupos sociales, pero otros es lo peor que les puede ocurrir. Sin más por el momento se definirá que lo acontecido en la historia no es más que un modelo de realidad.

    Los modelos de realidad, como los cuadros pictóricos y la literatura, son representaciones artí­sticas de lo cotidiano. Su objetivo es plasmar los sucesos que en algún momento acontecieron, u originar nuevas posibilidades al mezclar partes de lo ya vivido. Es así­ que encontramos que el arte concierne a una estética de la vida, la cual se expande a todos los aspectos que a esta le ocurren. En el modelo de realidad del relato Escenas de ira, tristeza y desesperación con momentos felices la protagonista nos cuenta mediante su diario el desgaste psicológico que conlleva el tener una pareja con una enfermedad con tremenda complejidad. El buscar un culpable de la tragedia es uno de los factores desencadenantes de la existencia dramática de Antonia, agravada por fantasmas del pasado. En algún momento encuentra una chispa de esperanza que es mermada prontamente con la angustia, situación muy repetitiva. Ethel Krauze (México 1954), escritora con una amplia variedad de géneros y autora de más de tres decenas de libros, manifiesta las complicaciones partí­cipes con la enfermedad. La extensión de los lí­mites de una afección patológica va más allá de lo corpóreo; penetra firmemente en el razonamiento de los individuos y crea en ellos un fiasco. La frustración del personaje central produce en ella un trastorno mental como secuela de ésta. Es consecuencia de su creer de que ese mal no terminará nunca y no soportará el tránsito por el mismo camino una infinidad de veces.

    Como narrador testigo directo y protagonista Antonia cuenta los acontecimientos de su historia, y la de su marido, detalladamente y sin una modificación más que la de su percepción. Pero, ¿cómo la vida da origen a una estética de la enfermedad? Si tomamos en cuenta que una estética de la vida se propaga a todos los eventos de ésta, la dolencia, como un evento no planeado, tiene en ella una estética propia. Parece extraordinario que se genere una dolencia mental a partir de una puramente fí­sica. Quizá Krauze nos formula, de un modo muy sutil, una estética de la enfermedad. Ahora bien, Argintescu declara especí­ficamente que â??La omnipotencia de las normas tradicionales; lo feo se define por lo contrario a lo normal, por lo que no se ve ordinariamente [â?¦] Lo bello se contunde con la medida, con lo común.â? (citado por Bastide, 2006, p. 152-153) Lo peculiar de la situación es que Antonia considera que el cáncer de su cónyuge es la peor desgracia que le pudo pasar, afirmación que acierta totalmente con Argintescu. Los padecimientos patológicos son el cúmulo de desórdenes fisiológicos, lo que representa algo anormal, por tanto feo o malo. En efecto podemos declarar que la estética de la enfermedad se enmarca en las secuelas de ésta. Al crearse la incertidumbre, el desconocimiento de lo venidero, se dispara en Antonia el desorden mental. Queda así­ constituida, consciente o inconscientemente, una estética de la enfermedad.

    La desilusión conduce al personaje al extremo de sus capacidades. A consecuencia de su pérdida de la voluntad para continuar el apoyo a su consorte, toma la culpa del inicio y el agravamiento del cáncer. Su existir se torna dramático, sin lo cual no parece capaz de vivir debido a la costumbre, y se origina sus sentires ocultos. Pero, ¿cómo es que se generan estas emociones? Las sensaciones que recibe principalmente el hombre desde su entorno son tres según Frobenius: â??1) la emoción: el hombre siente la naturaleza, deja que ella le cautive y le domine; 2) el juego: después, cuando su emoción es más libre y más matizada, juega con ella [â?¦] 3) el arte: cuando el espí­ritu se debilita, se materializa, cambia de forma, el individuo precisa su emoción antes de que muera â?¦â? (citado por Bastide, 2006, p.150) La emoción es generada por lo que se vive, por la naturaleza. Y al desconocer si la enfermedad desapareció, se engendra una inestabilidad emocional, además de miedo y repudio hacia ésta. El testimonio directo de ser quien sufre como protagonista nos encierra cada vez más en la historia. Anderson señala â??El protagonista cuenta en sus propias palabras lo que siente, piensa, haceâ?¦â? (1999, p.58) ¿Delirios del autor? ¿Locura escrita? Es una reconstrucción adecuada de la realidad. En la historia Antonia escribe lo acontecido en su diario, separa su ira, tristeza y desesperación de la felicidad. Palabras que permanecen ocultas en su redacción y en su pensamiento. Genera los sentimientos furtivos en constante crecimiento del personaje.

    Es conocido que disimular las emociones, guardarlas para la propia persona y para el alma, establece una base de los desórdenes mentales. Consideremos que la enfermedad es parte de la vida, no es extraordinario, es más común de lo que creemos. Aun así­ se considera a la enfermedad como feo, algo despreciable y hasta se le teme en algunos momentos. En conclusión, la enfermedad es la acumulación de las pequeñas perturbaciones del equilibrio dentro del cuerpo humano, el desentender del porvenir en la evolución del padecimiento patológico que sufre Pablo le provoca a Antonia el desequilibrio mental, junto con temor y rechazo a la enfermedad, situaciones que se Plasman en la narración de sus memorias. La manifestación de la estética de la enfermedad es generada por las dificultades que ésta tiene, implica la ira, tristeza y desesperación, junto con el manejo de éstas de una forma secreta. Se integra de ésta forma la enfermedad como una parte importante y fundamental de la vida, sin la cual no estarí­a completa, a un arte pura que inspira a las demás para generar nuevos conceptos de ésta. La estética de la vida lo engloba todo, desde lo minúsculo, hasta lo grandioso y sensacional. La frustración y la impotencia de estar ligada a un hombre enfermo, la carga moral que la acompaña dí­a a dí­a, la deja como un perfecto ejemplo fundamentado de este tipo de estética.

    Bibliografí­a:

    Anderson Imbert, Enrique (1999) Teorí­a y técnica del cuento, España: Ariel.
    Bastide, Roger (2006) Arte y sociedad, México: FCE.
    Krauze, E. (2010) Escenas de ira, tristeza y desesperación con momentos felices (1. ed.). México, D. F.: Alfaguara.

  • Astronautas cargan discovery en el espacio

    Los astronautas del Discovery repusieron el viernes un módulo de carga en el transbordador espacial y después inspeccionaron su nave para asegurarse de que estuviera lista para el regreso a Tierra.

    A medida que toca a su fin su visita a la estación espacial en órbita, los astronautas del transbordador finalmente introdujeron el módulo -y sus dos toneladas y media de desechos y equipos descartados- en la bodega del Discovery.

    La tarea debió completarse el jueves, pero problemas con el sistema de cierre demoraron su retiro de la estación internacional.

    Las dificultades prosiguieron hasta tan tarde el jueves que el control de la misión permitió que todos los 13 astronautas durmieran el viernes, en vísperas de la partida del Discovery.

    Poco después de despertar, Stephanie Wilson y Naoko Yamazaki emplearon el brazo robótico de la estación para transportar el módulo de 7 metros (21 pies) la corta distancia final.

    El brazo y el módulo estuvieron estacionados cerca de la bodega durante la noche.

    «Buen trabajo, damas», dijo la astronauta Dorothy Metcalf-Lindenburger después que el módulo quedó asegurado en su lugar.

    Después, Metcalf-Lindenburger y sus colegas activaron el brazo robótico para inspeccionar las alas y la nariz del Discovery. El procedimiento de cuatro horas suele efectuarse después del desacople.

    Pero una falla en la principal antena del transbordador, el día del lanzamiento el 5 de abril, hizo que la NASA adelantara la operación para que los archivos con las imágenes pudieran ser transmitidos desde la estación espacial.

    La NASA quiso asegurarse de que el escudo térmico del transbordador no sufriera ningún daño de la basura espacial que pudiera poner en peligro su regreso a la Tierra.

    El Discovery debía partir el sábado para aterrizar el lunes en la Florida. Los astronautas se saltaron el almuerzo para adelantar la inspección.

    Terminaron tres horas antes de lo previsto y agradecieron a los controladores por su ayuda con los preparativos.

    Las imágenes empezaron a transmitirse al control para que los expertos pudieran analizarlas. Cumplidos sus principales objetivos, los astronautas iban a tener liviano el resto de la jornada.

    Era un descanso bienvenido puesto que tuvieron que lidiar durante más de una semana con un problema tras otro.

    Actualmente en su penúltimo vuelo, el Discovery cumplirá su última misión en septiembre y llevar el módulo de carga con suministros y equipos.

    Después quedará permanentemente adosado a la estación espacial. El módulo, de construcción italiana, fue nombrado Leonardo

  • Avionazo en MTY, probable ataque

    La Procuraduría General de la República (PGR) inició una averiguación previa por la caída del avión de carga Airbus 300, ocurrida la noche del martes pasado en las inmediaciones del aeropuerto de Monterrey, e informó que incluso se investigará la posibilidad de que sea un acto de la delincuencia organizada.

    La dependencia federal detalló que la averiguación previa es la AP/PGR/NL/ESC-III/791/D/2010, por los delitos de homicidio, daño en propiedad ajena y lo que resulte.

    De acuerdo a la PGR, se llevarán a cabo todas las pesquisas para esclarecer si el Airbus 300, con matrícula XA-TUE, tenía alguna falla técnica o pudo ser dañado por algún proyectil, ya que debido a las circunstancias ninguna línea de investigación puede descartarse.

    La Procuraduría confirmó que los hechos ocurrieron alrededor de las 23:15 horas y que hasta el momento se tiene un saldo de siete muertos e innumerables daños materiales, por lo que fue necesario que elementos de la Policía Federal y del Ejército resguardaran la zona.

    De los siete muertos, cinco eran tripulantes de la aeronave: Adolfo Muller Pasos, piloto; José Manuel Guerra Juárez y Humberto Castillo Vera, ambos copilotos, y los mecánicos Erick Guzmán y Manfred Muller.

    La sexta víctima es Jesús Eduardo Picasso Martínez, de 34 años, empleado de una empresa de paquetería que circulaba en un vehículo al momento de la tragedia, mientras que la séptima persona que murió no ha sido identificada.

    Las autoridades federales informaron que serán 12 meses lo que tardará la investigación para dar un dictamen final.

    El avión era propiedad de la empresa de carga Aero Unión y se desplomó a 300 metros del acceso principal del Aeropuerto Internacional de Monterrey.

    Dadas las acciones de investigación y la forma en que quedó el avión está cerrada la carretera a la terminal aérea, pero permanece abierta la autopista que comunica a la ciudad de Monterrey con el aeropuerto