Algunas veces la han leído aquí o saben que la he referenciado, ella es Angy Newman quien me hace el honor de que charlemos de vez en cuando a través de twitter (sino lo sabe, mi cuenta es www.twitter.com/el_enigma) ya que ella es de las personas que ven en las redes sociales una oportunidad de crecimiento, profesional y personal estando en contacto con la gente.
Pues bien, aquí un par de sus escritos han aparecido y por ello mismo hoy la mención que hacemos, es que Angy Newman desde el pasado 8 de febrero tiene su propio blog.
Así es, por lo cual le deseamos que en esta aventura que inicia obtenga aun más bendiciones y crezca como lo que es, un ser de luz que comparte con todos, su forma de ver la vida.
¡Felicidades!
Etiqueta: Angy Newman
-
Angy Newman y su blog, ¡FELICIDADES!
-
La opinion de Angy Newman
¡Tú eres lo más importante!
Los hombres que han practicado el amor han tenido siempre como máxima que no hay nada comparable que ver una mujer arreglada. Asimismo, cuando se reflexiona en que un hombre desdeña, arruga, retuerce y resta importancia a las mejoras galas de una dama, y que ella invierte en grandiosos paños de oro y telas de plata, seda, un sin número de tretas, engaños, suspiros o ataques para que él la mire y logre de forma natural que él desee conocerla, acariciarla o simplemente, observarla, esto se obtiene mucho por el encanto de su olor.
Porque es muy cierto que él desea más a una mujer linda, presentable, sonriente, cálida, educada, inteligente y segura, que una simple pastora u otra mujer con que aunque sea bella, sea â??poco arregladaâ?.
Recordarás, que desde antaño se ha juzgado a Venus por hermosa y deseable no nada más por su belleza, sino, porque siempre iba elegantemente ataviada, y por lo general, perfumada, pues su dulce aroma se percibía a cien pasos de distancia. Porque siempre se ha dicho que los perfumes son una gran incitación al amor.
Esta es la razón de que las emperatrices y grandes damas de Roma hicieran uso de tales perfumes, como lo hacen las grandes damas de Francia y sobre todo las de España e Italia, que desde tiempos inmemorables han sido más curiosas y exquisitas en sus lujos que las francesas, así en perfumes como en vestidos y majestuosos atuendos, de los que las bellas de Francia han tomado los patrones y copiado la primorosa factura.
Cuando somos niños nuestros sentidos siempre se encuentran más activos, por ejemplo: los colores de un nuevo juguete, la diversión de un espectáculo, nos subyugaban, un olor o un sentido realmente nos â??fascinabanâ?. Que increíble era tener la â??capacidad de fijarnos en todoâ?â?¦pero qué pasaâ?¦es correcto, nos llega la madurez y nuestros sentidos se embotan, ya no nos fijamos tanto por la enorme excusa de estar siempre de prisa, haciendo cosas por los demás, pasando a la siguiente tarea, y dejando lamentablemente el cuidarte, consentirte, y verte siempre bien.
Que delicia estar en conciencia con nuestros sentidos, sintiéndonos capaces de estar en juicio y racionalidad. Si prestas atención a los detalles y te descubres asumiendo un ritmo más lento; tus objetivos no se fijarán en lo que podrías conseguir (la atención de esa(s) persona(s) que te interesa te mire) porque pareces muy considerado, muy atento. Si te involucrarás nuevamente en el reino infantil de los sentidos podrás envolverlo, y ellos tendrán una clara sensación de que los sumerges en algo distinto, un ingrediente esencial en la seducción.
Desde tiempos inmemorables, las mujeres y hombres hemos sabido que dentro del hombre aparentemente más sereno hay un animal que podemos digerir si llenamos sus sentidos con los atractivos físicos apropiados. La clave es atacar tantos frentes como sea posible. No ignores tú voz, tus gestos, tú andar, tú ropa, tus miradas, pero sobre todo: â??TU OLORâ?.
Recuerdo hace tiempo haber leído de que muchas de las mujeres más tentadoras de la historia distrajeron tanto a sus objetivos con detalles si bien sensuales, se acompañaban de una seguridad de verse y sentirse bellas por estar limpias, frescas y muy perfumadas.
En el caso de los hombres, todos recordarán a Rodolfo Valentino que reinó como el Gran Amante durante buena parte de la década de 1920. Las cualidades detrás de su atractivo ciertamente incluían su gallardo y casi hermoso rostro, sus habilidades dancísticas, una actitud deliciosa, aunque todos sabemos que quizá su rasgo más atrayente era su método pausado para cortejar, lo que no sabe mucha gente que el éxito real de Rodolfo Valentino era un olor que hacía que las mujeres terminaran por rendirse a â??todos sus encantosâ?.
Las películas de Rodolfo Valentino eran mudas, el público jamás lo oyó hablar: todo estaba en sus gestos. Los hombres acabaron por detestarlo, porque sus esposas y novias ya esperaban de ellos el lento y cuidadoso trato de Valentino. Valentino poseía una vena femenina: se decía que cortejaba a una mujer como lo haría otra, por eso creía y era parte de su personalidad, estar siempre impecable, predominando el olor de su boca, su cuerpo y de su ropa.
â??Qué regalo más inmenso y agradable tener cerca de ti a una persona que sonría, que sus gestos hablen de su armonía, su sutil pensamiento y emociones que nos comunican seguridad, devoción, amor hacia ti, acompañados de un olor que te provoca rendiciónâ?.
Las palabras son importantes en la seducción y tienen enorme poder para poder confundirte, distraer y halagar la vanidad de tu objetivo. Pero a la larga, lo más seductor es â??lo que no dices, lo que comunicas en forma indirectaâ? que interesante que puedas también expresarte con el olor.
Muchas personas pueden decir las frases indicadas; y una vez dichas, nada obliga a cumplirlas, e incluso, es posible olvidarlas del todo. El gesto, el regalo ponderado, los pequeños detalles parecen mucho más reales y sustanciales. También son mucho más encantadoras que las nobles palabras de amor, precisamente porque hablan por sí solos y dejan que tu objetivo (el seducido) vea en ti más de lo que contienes. Nunca le digas a alguien lo que sientes; que lo adivinen en tus miradas, en tus gestos y en tu olor.
Ese es el lenguaje más persuasivo.
â??El amor saca a la luz nuestras cualidades más nobles, y las ocultas, a veces, pueden ser las más vistas, simplemente por nuestro olor regimos mucho de nuestra vidaâ?
¡Controla tus emociones!
Soy Angy Newman
Vive, vive con seducción.
¡Bendiciones y amor en sus vidas, gracias!
-
La opinion de Angy Newman
¡Tú eres lo más importante!
El principal obstáculo para ser un seductor(a) es nuestro absurdo prejuicio de considerar el amor y al romance como una especie de mágico reino sagrado en el que las cosas simplemente suceden, si deben hacerlo. Esto puede parecer tal vez pintoresco y romántico, pero en realidad no es sino una excusa de nuestra â??perezaâ?. Lo que realmente seduce a una persona es el â??esfuerzo que invertimos en ella, porque esto muestra cuánto nos importa y lo valioso (a) que es para nosotrosâ?. Si dejas las cosas al azar es buscarte problemas, y revelaras que no tomas al amor y al romance muy en serio.
Por ejemplo, Casanova, invertía esfuerzo, el artificio que aplicaba a cada aventura, era lo que lo hacía tan endiabladamente seductor. Enamorarse entiéndase otra vez muy bien, â??no es cuestión de magiaâ?, sino de sicología. Una vez que conozcas la sicología de tu objetivo, y que traces la estrategia consecuente, estarás en mejores condiciones para ejercer sobre él o ella un hechizo mágico.
Un(a) seductor(a) no ve el amor como algo sagrado, sino como una guerra, en el cual todo se vale.
Los seductores nunca se abstraen en sí mismo. Su mirada apunta afuera, no adentro. Cuando conocen a alguien, su primer paso es identificarse con esa persona, para ver el mundo a través de sus ojos. Son varias las razones de esto:
Primero: el ensimismamiento es señal de inseguridad, es anti seductor. Todos tenemos inseguridades, pero los verdaderos seductores consiguen ignorarlas, pues su terapia al dudar de si mismo consiste en embelesarse con el mundo. Esto les concede un espíritu animado: todos queremos estar con ellos.
Segundo: el seductor se identifica rápidamente con el otro, se imagina qué se siente ser él, esto ayuda al seductor a recabar valiosa información, a saber qué hace vibrar a esa persona, â??qué hará para no poder pensar claramente y caer en la trampaâ?.
Bien armado con esta información, puede prestar una atención concentrada e individualizada, algo raro en un mundo en el que la mayoría de la gente sólo nos ve desde atrás de la pantalla de sus prejuicios. Identificarte con el objetivo es el primer paso táctico importante en la guerra de penetración.
Los seductores (as) se conciben como fuente de placer, como abejas que toman polen de unas flores para llevarlo a otras. De niños, recordarás, nos dedicamos principalmente al juego y al placer, ahora, de adultos, el paraíso está perdido o simplemente no está en nuestras expectativas, simplemente porque decidimos â??sobrecargarnos de responsabilidadesâ?. El seductor sabe que la gente espera â??siempre placer pues nunca es suficiente de amigos, familia, esposo, amantes, y para colmo, no sabe â??Cí?MO OBTENERLO DE SI MISMOâ?.
Cuando alguien llega a tu vida y te ofrece aventura y romance y a la vez, te encuentras vulnerable, estás dispuesto a sentir y llegar más allá de ciertos límites. Existe una gran verdad aunque muchas personas se resistan y se resistan: todos aclamamos nos arrolle la seducción y el amor de una persona, que nos libere de una obstinación usual.
A veces, la resistencia contra ti mismo es una manera de decir: ¡â??SEDí?CEME, POR FAVORâ?!
Los seductores (as) saben perfectamente que la posibilidad de placer hará que una persona lo siga, y experimentarlo, lo hará abrirse, convertirse vulnerable ante el contacto.
Un seductor ve la vida como teatro, en el que cada quien es actor. La mayoría de nosotros creemos tener papeles ceñidos en la vida, lo que nos vuelve infelices. Esos papeles son impuestos por varias personas: nuestros padres, nuestros familiares, nuestras parejas, etc.â?¦comúnmente, y tú lo sabes, no cumples el papel perfecto de tu vida porque no tienes el carácter de tener el control de tus emociones, sentimientos y cuerpo, dejando que la vida pase y pase y pase llegando a una edad en donde creas que tu tiempo y las oportunidades ya no son posible recuperarlas.
Siempre hay tiempo para recuperar tu confianza, solo depende de una decisión: la tuya.
La diferencia de un seductor con diferencia a muchas personas, es que puede ser cualquier persona y asumir muchos papeles. Esa libertad, esa soltura de cuerpo y espíritu es lo que los vuelve atractivos.
Lo que puede hacerte falta es que te sientas abrumado siempre por mantener una identidad, querer parecer un seductor también podría caerse en el ridículo. Aprender a ser natural te convierte en una persona libre, con soltura de cuerpo y espíritu. Tener una vida â??tan realâ? te hace que pierdas ilusiones, fantasías, juegos, etc.
Un seductor no le importa lo que digan los demás, juzga a los que se hacen pasar por moralistas, amargados, reprimidos o insensibles. Para él o ella todo es adaptable, fluido con la vida misma. Con todo esto hay persona que siguen creyendo que un seductor (a) no son personas de confianza, aquellas que se provocan ese pensamiento sé perfectamente que â??anhelan ser víctimas de alguna de estas personas que te hagan vibrar, soñar y desear buscar una vida con total plenitudâ?.
Deja de engañarte, deshazte de toda tendencia moralizante, adopta la festiva filosofía del seductor (a) y el resto de cualquier proceso de tu vida, y te aseguro, COMPLETAMENTE que todo te resultará fácil y natural.
¡Controla tus emociones!
Soy Angy Newman
Vive, vive con seducción.
¡Bendiciones y amor en sus vidas, gracias!
-
La opinion de Angy Newman
â??Existe un importante camino secundario por el que la mujer logra evadir la fortaleza del hombre y establecerse en el poder, y aún así, no se ha recibido la debida consideración de los historiadores. Desde el momento que las mujeres nos separamos de la muchedumbre, convirtiéndonos en un producto individual terminado, ofreciendo delicias que no se obtienen a la fuerza, sino sólo por él: HALAGO, es entonces cuando se creó el reinado del llamado sacerdotismo del amor, convirtiéndonos en un gran acontecimiento de gran alcance en la historia de la civilización.â?
La tortuosa ruta del arte del amor de parte de la mujer se pudo afirmar como una autoridad, afirmando desde un punto claro y decisivo en la humanidad una gran verdad: convertirnos en esclavas a merced del hombre, y esa, ha sido una decisión universal. Cada una hemos descubierto el poder lascivo, el secreto del arte del amor, el diabólico poder de una pasión artificialmente encendida y nunca saciada, para que ellos encuentren un encantamiento en nuestros sentidos, causando un efecto mágico en ellos, abriendo una gama infinitamente amplia de sensaciones, y siendo nosotras su estímulo para que sueñen inspirada mente en nosotras como lo más mágico y único en su vida.
Es inútil que trates de argumentar contra ese poder, imaginar ¡que no te interesa o que es malo y repulsivo! Cuanto más quieras resistirte al señuelo de la seducción ya sea como idea, como forma de poder, como tú quieras, te aseguro que más fascinado te encontrarás.
La razón es muy simple: todos conocemos el poder de hacer que alguien se enamore de nosotros. Nuestras acciones y gestos, lo que decimos, todo tiene efectos positivos o negativos en esa persona, tal vez no sepas bien a bien cómo tratarla (la seducción y a ella), pero esa sensación de poder, de seducción de saber qué va a pasar, es embriagadora.
Da seguridad, eso es cierto, convirtiéndote más seductor. Si lo trasladas a una situación social o laboral, un día estarás de excelente humor y las personas estarán más sensibles, más complacidos contigo. Estos momentos de seducción-poder, son efímeros, â??pero resuenan en la memoria con gran intensidad en los otrosâ?â?¦ ¿quieres de vuelta esos momentos de seducción-poder? Es fácil, deja de sentirte torpe, tímido o incapaz de impresionar a la gente. El canto seductor de la sirena es â??irresistibleâ? y escucha y aprende muy bien esto: en el mundo moderno nada te dará más poder que la habilidad de seducir.
Reducir el deseo de seducir es una suerte de reacción histérica, que revelará tu honda fascinación por este proceso, conseguirás que se agudicen tus deseos, que algún día saldrán a la superficie.
Estoy convencida que si manejas la seducción-poder con un arte de convencimiento de creer en ti, en lo que eres, en lo que tienes, no tendrás que exigirte una transformación por completo a tu carácter, ni hacer ningún tipo de mejora física en tu apariencia. La seducción es un juego de sicología, no de belleza, y dominar ese juego está al alcance de cualquiera.
Lo único que necesitas es ver al mundo de otro modo, a través de los ojos del seductor.
Una persona dispuesta a entender y llevar a la práctica la seducción, pero â??de verdad la entienda y la aprendaâ? no activa o desactiva su seducción-poder: ve toda interacción social y personal como una seducción en potencia.
Existen personas que en verdad no pierden tiempo, saben ejercer una seducción-poder hacia los hombres y las mujeres, causando un efecto positivo. Conociendo o sabiendo de la seducción-poder de esas personas, nos agrada estar con ellos, sin importar nada másâ?¦acaso, ¿no te gustaría ser el causante de ese efecto?
Conozco a personas que dividen su vida en momentos en que seducen, y otros, en que se contienen, causando confusión y limitaciones propias. El deseo erótico y el amor acechan bajo la superficie de casi cualquier encuentro humano, es mejor que des rienda suelta a tus habilidades a que trates de usarlas exclusivamente en la intimidad, de hecho, el seductor ve el mundo como su intimidadâ?¦¿cuál y cómo es tu intimidad?
Si piensas de acuerdo a tu intimidad, generarás un magnífico ímpetu seductor, y con cada seducción obtienes práctica y experiencia. Una seducción social hace más fácil la que sigue, pues tu seguridad aumenta y te vuelves más tentador.
Atraes a un creciente número de personas cuando tu aurea de seductor desciende sobre ti.
Los seductores tienen una perspectiva bélica en la vida, imaginan a cada persona como una especie de castillo amurallado que sitian. La seducción es un proceso de penetración: primero se penetra la mente del objetivo, su inicial estación de defensa. Una vez que el seductor ha penetrado la mente de su objetivo, logra con ello que su â??objetivo fantasee con élâ?, es fácil reducir la resistencia y causar la rendición física.
Los seductores no improvisan, no dejan al azar este proceso. Como todo buen general, hacen planes y estrategias, con la mira puesta en las particulares debilidades de su blanco.
¿Te gustaría saber cuál es el principal obstáculo de un seductor? Nos vemos en nuestra próxima Newmanía, y recuerda, se necesita más talento para amar que para mandar ejércitos.
â??El carisma es una presencia que nos excita a lograr nuestros objetivosâ?
Soy Angy Newman
Vive, vive con seducción.
¡Bendiciones y amor en sus vidas, gracias!
-
Mis estimados amigos, una recomendacion
Por medio del presente posts mis estimados amigos, me da mucho gusto el poder invitarlos a que escuchen el podcasts que Angy Newman y Javier Pacussich están haciendo y que tiene una excelente calidad lo que le viene a poner en el mercado del formato podcasts, como una excelente apuesta en este año.
Aquí, la publicidad y su imagen para que les conozcan
Technorati Profile